lunes, 25 de marzo de 2013

De la Reina Virgen al Rey Planeta.

Segundo trimestre acabado. Al fín un poco de tiempo para poner al día el blog...
Siguiendo nuestros proyectos primaverales, hace dias que el VQ es historia (nunca mejor dicho) y ahora estamos pegándonos ya por las puertas de Stalingrado.


Pero vayamos por partes. Primero toca el relato breve de nuestra incursión en el siglo de Felipe II (creo que el título debería hacer más referencia a él, verdadera figura principal del momento, que a la reina Isabel pero ya sabeis como son estos sajones protestantes) ;)
De hecho, si su muy "católica majestad" se daba a si mismo ese título de "Rey Planeta" (o de "nuevo Salomón" o de "dios Jano". El tio humilde no parecía, no...) por algo será. Y desde luego en nuestra partida lo demostró.

...Aunque no anticipemos acontecimientos. Esta ha sido, en un año, nuestra octava experiencia  al jueguiño de marras (bueno, mia, no todos los de esta vez estaban presentes en las anteriores) y nos llevó tres tardes. En todas las ocasiones menos en una fuimos siempre cuatro o más jugadores (cinco lo más frecuente). Tres "acabaron" antes de saber quien ganaba (eran de prueba, problemas de espacio, etc). De las otras, dos terminaron por muerte súbita: una con victoria del francés y otra del español (como en ésta, dos tunos antes del final). Una tercera la ganó el inglés (que también jugaba con el protestante) y la última se decidió por PV (triunfo del turco).


Esta es una vista, más o menos general, hacia el comienzo del "match". Al fondo podeis ver las hordas mamelucas a las puertas de Praga (si, Viena ya es nuestra, jajajaja).

Se ha hablado mucho del juego y la mayoría conoceis bien sus sistemas así que poco hay que pueda añadir excepto, quiza, unas pequeñas reflexiones sobre las posibilidades que se abren a partir del turno tres: el uso de informantes, jesuitas y demas. La verdad que (al menos en nuestra experiencia) quitando al español, que suele andar sobrado de puntos de activación (o al inglés si no está muy enredado en conflictos), le hemos visto poco uso (incluso a la posibilidad de eliminar líderes).
En esta partida hasta el intento de levantamiento católico en la pérfida albión  fracasó estrepitosamente, a pesar del porrón de dados que disfrutaba su "católica majestad".


O sea que yo diría que añaden "chrome" (lo cual es de agradecer, no obstante) pero poco más.
Desde luego, aprecio en mayor medida el añadido de los artistas/científicos, como el  bueno de Arcimboldo.  Y además, en este caso como otomano ni me lo planteé, bastante tenía con estar excavando en las arenas de Suez...

Por cierto, notareis que las fotos de "acción" se centran en Francia, no es casualidad pues allí las hoxxx volaron como panes y su jugador se quejaba armargamente de que tenía el país hecho unos zorros (además de que era el "fotógrafo"). :)


Respecto a los demas infieles... pues se dieron pal pelo a base de bien: Inglaterra trató de nadar y salvar la ropa, acercándose a la victoria hasta que, finalmente, tuvo que comprometerse para evitar la aniquilación total del holandés antes las armas católicas, que prácticamente le tomaron el país (véase arriba). Inmediatamente después, los hugonotes dieron algo de respiro a la causa protestante pero a la larga fueron responsables de su derrota, pues al producirse la "Unión de Armas" eso allanó el camino al triunfo militar hispano, facilitándole hacerse con las dos "keys" que le faltaban.


En cuanto a mi actuación (imágen, gran aportación de Mika_F1en BGG), seguí una estrategia basada en dos principios: una postura de intervención contra el Holy Roman, tomándole todos los territorios que pude y acabando por secuestrar a sus líderes en una cabalgada hacia Praga (lo cual me garantizó cierta tranquilidad por su parte) rmientras, por contra, me mantenía a la defensiva frente a la hositilidad española en el Mediterraneo.
Tras conseguir la paz con ambos (el protestante estaba ocupando bastante a las huestes de Felipe) pude luego centrarme en el intento (fracasado casi hasta el final) de abrir mis territorios al este, con la elaboración del citado canal. Pero como decía, llegó demasiado tarde para tener relevancia con lo que tuve que sacrificar mis ansias de colonialismo ultramarino.
Así que me volví contra Venecia, nueva situación complicada puesto que a pesar de conseguir  someterla totalmente, me supuso el gasto de bastante tiempo y recursos.
La idea era no enfrentarme a más de una guerra cada vez y empezar a prepararme para la inevitable colisión con España que tenía prevista para el turno siguiente (el último), tomándome éste como de redespliegue. Tal como iban sucediendo las cosas estaba apostando por llegar al final y vencer  por PV (era el que iba por delante de todos).
No obstante, a la larga esa cautela se desveló errada y debí haberme arriesgado a luchar antes... podemos decir que me faltó un turno.

En todo caso, una vez más una partida estupenda!



The End.


lunes, 11 de marzo de 2013

Red Star Rising. Crónica de una victoria "anticipada".

Ya hace días que remató la partidiña al Red Star (de hecho, casi estamos acabando la del Virgin Queen, qué vicio!). La verdad que el juego fue un descubrimiento pero, irónicamente, la victoria germana en el verano del 43 hizo que no pudiéramos disfrutarlo del todo. Teníamos prevista una experiencia lúdica más larga ya que, suponíamos, la campaña debería permitir la lucha de "ida y vuelta" pero nos perdimos la segunda parte.
No pasa nada, volveremos a probarlo.


Arriba podeis ver, prácticamente, el máximo avance conseguido por las hordas teutónicas.
A la derecha, Moscú está amenazado. Los soviéticos conseguirían reconducir la situación en el primer año de lucha (empezamos en el 42 pues nos habían comentado que hacerlo con Barbarrosa suponía muchas complicaciones para el ruso) aunque no en la estación siguiente.

En el sur, las vanguardias germanas han llegado hasta el Cáucaso pero (ventajas del conocimiento histórico) una vez destruidas ciertas instalaciones industriales se han retirado. No hay mucho más que ganar ahi y si bastante que perder, debilitando tus líneas al extenderlas tanto. Y nada de obsesionarse con esa ciudad llamada como Stalin que está en el lado equivocado del rio! ;)


Como ya comenté en el hilo anterior, los mecanismos del juego son fáciles de asimilar pero tienen sutilezas que, al menos en principio, pueden no ser evidentes. A los alemanes, por ejemplo, nos costó algunos turnos comprender que podíamos arriesgar nuestras valiosísimas tropas panzer colándose profundamente tras las líneas enemigas pues en el siguiente turno eres tú el que vuelve a mover en primer lugar, con lo que puedes retirar (o apoyar) las más expuestas. También, para ambos bandos, lo importante que resulta mantener un frente lineal, por aquello de evitar faltas de suministro y tiradas de "atrition" (aunque para los "soviets" es menos grave). Y para estos últimos el uso constante de los líderes (sirven sólo en ataque, recordad) que aumentan las bajas pero las suyas "vuelven", mientras las germanas no.


En esta vista general (aproximadamente del turno 27) podeis ver como las tropas rusas empiezan a agolparse en torno a los flancos del sexto ejército. Abundan las unidades con marcadores de categoría B y A (Guardias y ejércitos de tanques, algunos apilados con líderes y HQ).
Obviamente nuestros antagonistas habían planeado un golpe rotundo en ese sector mientras en la zona norte plantearon una estrategia más encaminada al desgaste.


Para contrarrestar precisamente esa táctica (y mantener la iniciativa), en la reunión que tuvimos en la Wolfschanze, el invierno anterior, planteamos una ofensiva constante en la zona de de Voronez (parte inferior de la foto). Allí nos tundimos a base de bien, en un intento de desgastar todo lo posible las reservas enemigas, arriesgándonos a perder valiosos pasos de unidades (pues enfrentarse más tarde al "rodillo proletario" prácticamente intacto es suicida). Escogimos ese lugar, además, por la posibilidad de atraer reservas de ambos sectores. Aunque a corto plazo la operación fue un fracaso, pues fuimos rechazados y no conseguimos el gran cerco que habíamos previsto, estrategicamente (y de forma inesperada) obtuvimos un gran rédito ya que el desplazamiento de las unidades que nos enfrentaron debilitó la guarnición de Moscú.


Esa fue probablemente la primera causa de nuestra victoria (y sin detrimento de que nuestros queridos "adversarios" puedan hacer algún otra consideración a posteriori).

Mientras, en el frente de Leningrado, las cosas iban muuuuucho más lentas. El terreno es complicado y favorece al defensor (fijaos en la ausencia casi total de unidades blindadas, negras). Y es que la presión constante del enemigo era suficiente para obligarnos a ir cediendo terreno poco a poco.


Entonces llegó la siguiente reunión en la Guarida del Lobo.
Allí presentamos nuestro plan para el próximo año... decidimos enfrentar la oleada que se nos iba a venir encima con un repliegue hasta las fronteras de Polonia, pero (tras un duro debate contra la vieja guardia prusiana del alto mando) aplázandolo -para despistar- hasta el último momento (o sea el turno siguiente). Y mientras, una columna blindada hacía un esfuerzo por filtrarse en el hueco que había quedado ante la capital rusa (observando de reojo con inquietud la citada pila de refuerzos que empezaban a agolparse ante nosotros).


Finalmente, tras una serie de ataques relámpago, con el apoyo de la luftwaffe (véase arriba) alcanzamos sus arrabales y posteriormente las inmediaciones de la catedral de San Basilio.
La tirada subsiguiente (modificada favorablemente por otros objetivos conquistados) resultó en la rendición enemiga y en nuestra marcha triunfal por la Plaza Roja! Nunca tantos habían debido tanto a tan poco... dado. ;)

Victoria! Como luego publicó uno de nuestros colegas (cito casi textualmente):

"Tras haber triunfado en la campaña de Rusia, Manstein y Paulus se ponen al frente de la batalla de Normandía. Los estadounidenses son rechazados y piden el armisticio. La guerra termina. Filipinas pasa a ser territorio japonés, lo mismo que Midway y Pearl Harbour. Churchill es juzgado como criminal de guerra en la Haya."


The End.